Me crié bajo el soletín de un pueblo de Córdoba hasta que lo cambié por el asfalto madrileño durante los años universitarios para estudiar periodismo. De allí a París. El año que Obama ganó las elecciones yo vivía en el extranjero por primera vez, la razón fue una beca Erasmus. Desde entonces no he deshecho las maletas. Madrid de nuevo para el último año de carrera, París después para unas prácticas en el departamento de comunicación de Mouvement Européen-France. Después vendría Grecia, concretamente Lefkada. Allí trabajé en la radio de la asociación Pistes Solidaires al mismo tiempo que viví un año marcado por la crisis en el país. También aproveché para aprender algunos pasos de sirtaki, viajar haciendo autostop y chapurrear el griego. De Grecia me fui a Túnez pasando por París de nuevo. En Túnez trabajé con la asociación Forum tunisien pour les droits économiques et sociaux preparando el Foro Social Mundial de 2013. Por cierto, me llamo Ana.